Eres irresistible cuando estoy cerca de tí,
y cuando mi alma y la tuya se añoran.
Tan perfecta como humana, y tan amante que hasta dueles.
De ojos inteligentes y piel experta,
manos bardas y corazón galopante,
irresistible tú, anonadado yo,
cuerpo sin mente me resta.
Eres irresistible cuando lloras,
y cuando ríes lo eres también, pero riendo.
Tan diferente al resto, y tan parecida a un ángel...
tus palabras hablan casi igual que tu sonrisa;
boca y secretos irresistibles,
pues equiparo lo tangible con lo etéreo,
cuando de un ser irresistible como tú se trata.
No hay comentarios:
Publicar un comentario